En 1ra de Juan está escrito un verso que abarca mucho pensamiento y meditación para estos días difíciles que enfrentamos día a día. Veamos, 1ª de Juan, 5:v21 - «Hijitos, guardaos de los ídolos. Amén».
Juan nos aconseja que nos guardamos de los ídolos. ¿Pero que son los ídolos?
Para muchas personas lo primero que se viene a la mente son estatuas de madera o amuletos. Pero los ídolos son mucho más que eso y por eso es importante identificarlos para no caer en pecado.
Los ídolos son todas aquellas cosas que nos alejan de Dios. El amor al dinero, el querer tener muchas cosas materiales, los lujos, la envidia, el oído, los celos y muchas cosas más que ponemos antes que poner la confianza y el amor en Dios.
Para muchas personas lo primero que se viene a la mente son estatuas de madera o amuletos. Pero los ídolos son mucho más que eso y por eso es importante identificarlos para no caer en pecado.
Los ídolos son todas aquellas cosas que nos alejan de Dios. El amor al dinero, el querer tener muchas cosas materiales, los lujos, la envidia, el oído, los celos y muchas cosas más que ponemos antes que poner la confianza y el amor en Dios.
En 1ª de Juan, 5:20 nos dice la palabra, «Pero sabemos que el Hijo de Dios es venido, y nos ha dado entendimiento; para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesús, el Cristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna». No sólo es el verdadero Dios, sino que nos dice Las Sagradas Escrituras claramente que Él es la vida eterna.
Palabras para la vida eterna. Lo material pasará, el dinero, las prendas, el lujo, todas esas cosas que nos alejan de la humildad, el amor, la compasión, la sinceridad, la alegría de compartir con los demás, en fin todas esas cosas que nos llenan de alegría y nos acercan más a Dios. Él es el verdadero. Debemos de dar crédito a Dios por todas las cosas buenas. Pedirle con todo el corazón sin dudar que el es el que sustenta la vida y nuestras necesidades. Adoremos a Dios y a Jesús con todas nuestras fuerzas.
Palabras para la vida eterna. Lo material pasará, el dinero, las prendas, el lujo, todas esas cosas que nos alejan de la humildad, el amor, la compasión, la sinceridad, la alegría de compartir con los demás, en fin todas esas cosas que nos llenan de alegría y nos acercan más a Dios. Él es el verdadero. Debemos de dar crédito a Dios por todas las cosas buenas. Pedirle con todo el corazón sin dudar que el es el que sustenta la vida y nuestras necesidades. Adoremos a Dios y a Jesús con todas nuestras fuerzas.