Desde el principio y origen de todo el universo, Dios está con todos. Demos gracias a Dios por cada situación en nuestras vidas. Por las cosas buenas y por las cosas menos buenas que nos causan sin sabor. Todas las cosas en nuestras vidas están diseñadas para aprender. Dios nos prueba en cada momento. Tal y como probó a Abraham en su fe al pedirle que sacrificar su único hijo, y de las mismas manera permitió a Satanás que pusiera pruebas a Job. La fe y conocimiento de Dios lo mantuvieron firme. La vida es más hermosa cuando confiamos plenamente en que Dios está al timón. Dios en su magnífica misericordia nos regala cada día para que identifiquemos nuestras debilidades y fortalezas.
Cerremos los ojos en este momento y demos gracias a Dios por todo. Por lo agradable y lo menos agradable. Por las pruebas que parecen poner dudas. Pidamos con fe por las cosas que deseamos en nuestras vidas y también por eso que queremos pero sin olvidar pedir por s su guía. Para que la esdrújula de su voluntad nos guíe en nuestros caminos.
Dios les bendiga y que la alegría de la garantía de su amor eterno reine en sus corazones!